I
Mi corazón se desangra
Los versos se me desgranan
Cuando te veo, lejana y
A la vez tan cercana
Que las palabras susurro
Escuchando el aleteo
De el latir en tu pecho
Colibrí en su aleteo
Portentoso, Poderoso
Ronroneando en ese beso

II
Hija mía, Ángel Bello
Odalisca, ensoñación
El Señor te ha deparado
Un Padre que, con sus versos
Charrasquea una canción
Sin guitarra, sin violines
Sin cornetas ni trombón

III
Las letras salen, aladas
Presurosas, recatadas
Tímidas en sus inicios
Del Amor una explosión
Pues que dicha para un Padre
Recibir en plena vida
La plenitud del Señor
En una hija centrada
De sencillez ataviada
Mostrando en la mirada
Lo que vá en el corazón
Pues sin dobleces ni nada
Así me la envió Dios

IV
En las dunas de esta playa
Playa es tu corazón y
Yo, sigo siendo el naufrago
El náufrago del Señor
Y quien en su Misericordia
Esta hija me envió

V
Es por eso que
EN LAS DUNAS DE ESTA PLAYA
El Señor me manifestó
Cuanto me Quería y Quiere
Sea un náufrago o no


Jesús A Peñaranda Chadid
Playa Parguito, 4/6/2013
Isla de Margarita
República Bolivariana de Venezuela