I
Amado Padre, Ajaib, Dios Nuestro
En Mente y Corazón te sigo sintiendo y
Es por tu Gracia que sigo viviendo
II
Me encantas con tus Bajanes y Poemas
MI torpe mente, cual venenosa serpiente
Al menos un instante se inmoviliza
Ante la música de tu flauta
Caracola, Tambor, Trueno y Campanada
Divino Naam, Sustento Eterno
III
Gateando, llorando, llego a tu corazón
Amado Ajaib, Divino Maestro
Tocando a tu puerta, soy mendigo
Mendigo contento, contento mendigo
No soy nadie, lo sabes, sin tu consentimiento
IV
Misericordioso, TÚ, Pleno de Amor blando o
"Ajustando un poco el lazo"
Doblemente Misericordioso
Me has mantenido en el frente de batalla y
Siempre has sido EL agua de vida
Apagando la sed de mi desierto
Sofocando el fuego de mi infierno Interno
V
En muchísimas formas te me has presentado y
Ahora, Interno, con o sin forma, como el Maestro
Se que muy poco estoy utilizando el tiempo
Para agradecerte lo que estas haciendo
Ahora sigo pidiéndote, Ajaib, Padre Eterno
Que a este pobre hijo, pecador diario
Lo sigas bendiciendo
Pues tu Eres mi Todo y
Yo, tu Discípulo, Hari, el Imperfecto
Porlamar, 5/4/2005
Isla de Margarita, República Bolivariana de Venezuela
Hari recibió una Poesía de un Discípulo y esa inspiró un
"CANTO A AJAIB"
(Alabanzas a SanJí)
Créditos